Porque migrar es un derecho humano y propuestas a atravesar los discursos mediáticos e institucionales que desnaturalizan las migraciones como si fuesen fenómenos recientes y nocivos, un grupo de amigas, con el apoyo del Parque Cultural de Valparaíso, reunieron a hombres, mujeres, niños y niñas en torno a la celebración del segundo Picnic Migrante, celebrando y dando, una vez más, la bienvenida a los y las migrantes que, desde distintos lugares, con distintas experiencias y historias de vida únicas, llegaron a Valparaíso buscando nuevas oportunidades. Así, con vecinos y vecinas, el disfrutar de una tarde compartiendo música, comida, experiencias y saberes va derribando la ola de prejuicios y estereotipos creados, artificios que permanecen propagando, más consciente que inconscientemente, el racismo y la xenofobia en las personas, en la sociedad y sus formas de relacionarse. Hoy más que nunca, cuando Chile es uno de los pocos países que decide no adherir al Pacto Migratorio de la ONU y dispone toda su solidaridad en el regreso de hombres y mujeres haitianos con el Plan Retorno, estos espacios de interacción y generación de redes compartiendo y mirándonos a la cara son vitales para reconocernos tan distintos y tan iguales a la vez.
2do Picnic Migrante en Valparaíso: porque migrar es un Derecho Humano playa mujeres
Porque migrar es un derecho humano y propuestas a atravesar los discursos mediáticos e institucionales que desnaturalizan las migraciones como si fuesen fenómenos recientes y nocivos, un grupo de amigas, con el apoyo del Parque Cultural de Valparaíso, reunieron a hombres, mujeres, niños y niñas en torno a la celebración del segundo Picnic Migrante, celebrando y dando, una vez más, la bienvenida a los y las migrantes que, desde distintos lugares, con distintas experiencias y historias de vida únicas, llegaron a Valparaíso buscando nuevas oportunidades. Así, con vecinos y vecinas, el disfrutar de una tarde compartiendo música, comida, experiencias y saberes va derribando la ola de prejuicios y estereotipos creados, artificios que permanecen propagando, más consciente que inconscientemente, el racismo y la xenofobia en las personas, en la sociedad y sus formas de relacionarse. Hoy más que nunca, cuando Chile es uno de los pocos países que decide no adherir al Pacto Migratorio de la ONU y dispone toda su solidaridad en el regreso de hombres y mujeres haitianos con el Plan Retorno, estos espacios de interacción y generación de redes compartiendo y mirándonos a la cara son vitales para reconocernos tan distintos y tan iguales a la vez.
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